Josefa Álvarez Luque: (1893-1965) recibió, vía canalización, una importante obra espiritual que describe –entre otras- la vida de dos grandes instructores: Moisés y Jesús de Nazaret.
Sinopsis: Esta magnífica obra, canalizada por Josefa L. Álvarez, describe la personalidad de Osarsip, que más tarde recibió el nombre de Moisés, el sacerdote de Osiris que defendía la idea de un Dios único. Unas páginas de plena actualidad, que nos muestran unos procesos psíquicos universales. Más allá del personaje histórico, Moisés representa una parte de la psique humana susceptible de conectar con la divinidad y de alejarse del mundo de la Matrix, representado por el antiguo Egipto. Es decir, el mundo en el que adoramos múltiples dioses, objetos externos, aparatos, artificios, bienes de consumo. Adorar a un dios único en el Egipto de los faraones podía llevar a la muerte.
El Pueblo Elegido es el que cree en un dios único, es el que habla el idioma de la unidad divina, el que persigue un único objetivo: hacer la voluntad del Padre, cumplir con el propio plan de vida.
Cita: En otra vida Moisés fue Juno, conocido como el mago de los mares, que protegió a los indefensos y débiles de los piratas.
Comentario: Esto significa que la tendencia llamada “Moisés” tiene la facultad de proteger a las tendencias más débiles –las que se dejan llevar por el mundo emocional- de la psique de ser pirateadas por otras más fuertes que pretenden desviar su energía.
Cita: Moisés fue hijo de Av Isis Thimetis, princesa real, hija del Faraón Ramsés I, y Amram, joyero israelita. Era heredera al trono de Egipto. Ramsés II era su medio hermano (de padre pero no de madre) y es el que reinaba cuando nació Moisés. Thimetis no sabía cómo presentar a su hijo ante la corte de Egipto y puso el niño en un canasto en el rio e hizo como si se lo hubiera encontrado, y se declaró madre adoptiva de Osarsip (el nombre original de Moisés, que significa “salvado de las aguas”).
Comentario: La parte de la psique llamada “Moisés” ha de ser resguardada de los poderes fácticos desde el momento en que se activa.
Cita: Le dijo el anciano sacerdote Amonthep a Thimetis: Si tienes la capacidad de acertar con lo que Dios quiere de ti, tu senda es una suave llanura donde si algún tropiezo se cruza, fácilmente lo salvarás porque tendrás su fuerza y su poder. Y los hermosos frutos que recogerás de ese obrar tuyo en acuerdo con la suprema voluntad de Dios vivo, será la prueba de que andas por tu camino: hacer la voluntad del Padre.
Comentario: Aquí tenemos una clave de gran importancia: cuando estamos a las órdenes del Padre, dispuestos a cumplir con el plan que ha trazado para nosotros, podemos allanar todos los obstáculos.
Cita: En el arcaico Egipto todo era símbolo y misterio, en las criptas de los templos, las ciencias ocultas estaban escritas en signos sobre muros y columnas.
Comentario: Podemos deducir que el antiguo Egipto simboliza el conocimiento exterior, el cual requiere un esfuerzo considerable para ser alcanzado. Este conocimiento demanda especialistas en simbología capaces de descifrar sus mensajes. Como decía Jung: “A menor conciencia, mayor imago’. Egipto representa ese ‘mayor imago”, simbolizando las señales externas que necesitamos cuando no somos capaces de captar la sabiduría interna, ya que el cuerpo del pensamiento y la conexión con la mente superior aún no han emergido.
En el antiguo Egipto, era fundamental copiar todas las escrituras en múltiples idiomas para preservarlas. Los libros canalizados por Josefa Luque Álvarez nos demuestran que esta práctica es antigua y que podemos acceder a los conocimientos a través de los archivos cuánticos del saber.
Cita: Egipto (se refieren al Egipto de Moisés) es un país de idólatras.
Comentario: Un idólatra es una persona que adora y venera objetos externos, como monumentos o artículos de marca. Por ejemplo, puede llegar a venerar un reloj de lujo en lugar de utilizarlo para su propósito original: marcar la hora. El antiguo Egipto representa la era de los tótems, un tiempo en el que lo sagrado se encuentra fuera de uno mismo. En que, para acceder al conocimiento, es necesario desplazarse a un lugar específico, lo que implica un costo significativo. En contraste, en la nueva era que está emergiendo, llegará un momento en que los educadores serán virtuales, manifestándose como presencias holográficas.
Cita: La madre del Faraón Ramsés II emitió un decreto que declaraba esclavos a todos los extranjeros del país, a excepción de los que pagaran un fuerte tributo en oro, plata o alimentos.
Comentario: Es decir, eres esclavo del sistema y estás a su servicio o bien aportas valores u ofreces los frutos de tus experiencias. Pero ese mismo sistema es el que crea al libertador porque Moisés era nieto de Ramsés I, aunque en la versión oficial fue adoptado/recogido por Thimetis. Podemos deducir que explorar el mundo a través del ego personal, del GPS en Matrix, acaba conduciendo inexorablemente al contacto con su contrapartida de la azotea: el Ego Superior. Pero existe la opción de salir de la esclavitud sin necesitar las plagas (léase enfermedades, problemas, sufrimiento etc.). Podemos liberarnos de la Matrix sin pasar por el Covid, por una erupción volcánica o por una desgracia cualquiera.
Cita: Para entrar en Tebas, había diferentes puertas según la ocupación o rango de las personas, había por ejemplo la puerta de los labriegos, la de los estudiantes, y cada uno tenía que pasar por la que le correspondía.
Comentario: Esto da que pensar, hay diferentes formas de conectarse con el espíritu, según la preparación de la persona, no se puede aplicar a todos el mismo rasero.
Cita: Es su capacidad de amar lo que hace al hombre semejante a Dios. El mundo solo vive el presente porque lo ignora todo -dice Osarsip/Moisés- pero quien ahonda en los viejos anales de la humanidad revive el pasado y vislumbra el porvenir. Lo de ayer revive hoy y volverá a vivir en el futuro.
Comentario: Para quien bucea en los archivos de la memoria universal, el tiempo no existe. Lo demuestra el hecho de que toda la historia de Moisés es de plena actualidad, constituye un relato –igual que la vida de Jesús- que describe nuestros procesos psíquicos.
Cita: Esta Tierra está llena a desbordar de luz, de alegría, de bellezas indescriptibles. La oscuridad, la tristeza, el dolor, la fealdad, la negrura, la tiniebla, no están en la Tierra sino en el alma de los seres que la habitamos.
Comentario: Razonamiento aplicable a cualquier tierra.
Cita: El lector pensará, quizá, que la de Osarsip no podía llamarse soledad puesto que era amado de todos y aún admirado de todos. Pero hay diferencia entre el amor de todos y el amor de aquellos pocos que nos comprenden y comparten con nosotros el pensar y el sentir. Porque éste es el único amor que nos da compañía, fortaleza, consuelo y alegrías en la vida. El amor de las muchedumbres satisface hasta cierto punto y de diversas maneras. El amor que es también comprensión, confianza plena, igual sentir y pensar nos ayuda a vivir nuestra vida como la Eterna Ley nos manda vivirla.
Cita: El alma humana, la divina Psiquis, tiene a su disposición una luz potente, una misteriosa antorcha que Inteligencias Superiores encienden para ella cuando ella la pide y de verdad la busca y la quiere. Eso es lo que llamamos Meditación.
Comentario: Promover y facilitar el acceso a esa luz es la función de la Alquimia Genética.
Cita: La llave de oro abre el huerto de los enigmas. Su puerta solo se puede abrir con la llave de oro de una decidida y valerosa voluntad.
Comentario: En efecto, cuando el ego cierra la puerta, si, al negociar con él, percibe que hay en nosotros una voluntad de cambio y de toma de conciencia, entonces la abre. Este tipo de negociaciones forma parte de los protocolos de la Alquimia Genética.
Cita: Dice Moisés: En la soledad del desierto he meditado mucho y creo que la única forma de dar realidad y vida a una idea, es preparando una porción de humanidad para aceptarla.
Comentario: Así actúan los grandes instructores de la humanidad.
Cita: Ramsés II acabó restaurando el templo de On de alta sabiduría divina.
Comentario: Este es un hecho de alto valor simbólico porque ilustra el momento en que el ego personal claudica, se acerca a la sabiduría y empieza a ascender.
Cita: Bajemos a la cripta (del Templo de On) donde presiento que te espera la gran iluminación, le dice Moisés a Ramsés II. El faraón no quería bajar a la cripta, hubiera preferido huir de su destino, de esa tremenda fuerza de eterna vida, de ese algo inconcebible para él, de ser representante del poder supremo que tiene en sí mismo la ilimitada magnitud del universo infinito. Más no podía resistirse a la voz de Moisés, que repitió hasta tres veces: bajemos a la cripta. Y bajaron.
Comentario: Esta es sin duda la parte más apasionante del libro: un increíble diálogo de ascensión del ego humano que quiere abdicar, que se acongoja ante la idea de ser un representante del eterno poder sobre Egipto. Apasionante porque se trata de un diálogo plenamente vigente, el mismo que plantea la mente racional cuando se trata de emprender un camino de búsqueda interior. Moisés, en este contexto, representa el Yo Superior y Ramsés la mente racional. La mente se resiste a empoderarse, a alejarse de un poder exterior para acercarse a un poder interior tan ilimitado como el mismísimo universo.
Moisés, representante del espíritu, tiene el mérito –una tarea que sería perfeccionada por Jesucristo 1500 años más tarde- de intentar crear unas vías neuronales nuevas que facilitaran este empoderamiento. Por esto insiste y le dice tres veces al Faraón: bajemos a la cripta, lo cual equivale a decirle: viaja hacia tu interior, explórate.
Cita: Bajaron hacia la cripta pero el Faraón quedó como clavado en el umbral de la puerta: una gran presencia sutil (de otros planos) encapuchada le cerró el paso. El Faraón sintió que no estaba tan purificado como Moisés. En la cripta de On sólo pueden entrar los puros de corazón –dijo el Faraón- para poder entrar, debo borrar todo lo malo que hay en mi vida. Sólo pueden penetrar en la cripta de los secretos divinos quienes han dominado su Yo inferior.
Se produjo entonces una importante transformación de Ramsés II: suspendió la venta de esclavos, cerró las casas de placer, liberó prisioneros, suspendió la fabricación de armamento a gran escala y renunció a sus guerras de conquista.
Comentario: La bajada del Faraón a la cripta de On puede ser considerada como un proceso de ascenso del ego. Suspender la venta de esclavos equivale a dejar de esclavizar a una parte de su pueblo celular. Lo esclavizamos cuando le obligamos a crear patologías o disfunciones para poder así tener una posibilidad de captar los mensajes que nos manda el alma.
Cerrar las casas de placer equivale a alejarse de los placeres mundanos, es decir de las cosas que sólo aportan un placer efímero y superficial. Liberar prisioneros es liberar tendencias que no podían manifestarse porque el ego de superficie no lo permitía. Suspender la fabricación de armamento es dejar de defenderse, de creer que todo el mundo exterior nos quiere atacar, de creer que todo el mundo es culpable hasta que demuestra su inocencia. Renunciar a las guerras de conquista es dejar de querer conquistar espacios exteriores, dejar de pulular y agitarse por la superficie.
Cita: Ramsés II representa la potencia material y Moisés la espiritual.
Comentario: Las vivencias de Moisés y el Faraón describen de forma muy hermosa la colaboración entre el espíritu y la materia, entre el Yo más sublime y el Yo más terrenal.
Cita: El Faraón dedicó unos días a la meditación y al recogimiento, cuando fueron a visitarlo Thimetis y Moisés, ambos lanzaron una exclamación de asombro cuando lo vieron cubierto con la amplia vestidura color violeta oscuro, que usaban los sacerdotes sometidos a voluntaria penitencia de expiación, por delitos o faltas de gravedad. Echó el capuchón a la espalda y su arrogante cabeza rapada quedó al descubierto.
– Hermano mío –le dijo Thimetis- ¿por qué hiciste esto?, para asociarte a nuestros ideales de fraternidad y redención humanas, no era necesaria la práctica externa de lo que se lleva en lo íntimo del alma.
– ¡Déjale hacer! –dijo bondadosamente un sabio anciano que estaba presente- cuando se comienzan estos caminos, el alma padece mucho por el tiempo perdido. Y su afán de apresurar la carrera, la obliga a ayudarse con formas externas, que le dan la ilusión de acercarse más al dichoso final.
Comentario: Interesantísima reflexión sobre la necesidad que tienen algunas personas de vivir una espiritualidad exterior intentando demostrarse a sí mismas (y a los demás) por fuera lo que aspiran a ser por dentro.
Cita: Nuestra humanidad –dijo Moisés- anda siempre buscando motivos de división, de separación. Yo sigo un axioma, ley de un iluminado profeta de la tierra donde nace el Sol: Krishna, que decía a sus discípulos: “No cometáis jamás el delito de separatismo porque todos somos uno en el infinito seno de Atman”.
Óyeme, Faraón, el amor a la tierra en que hemos nacido pone a veces una venda en nuestra mente y esa venda es de ordinario más espesa y resistente en los que gobiernan y son como dueños absolutos de esa tierra.
Comentario: Han pasado 3500 años, pero seguimos en lo mismo. Y lo más preocupante del separatismo es su efecto sobre el mundo celular. Porque nuestras celulitas somos nosotros en pequeñito, son perfectas réplicas de nosotros. Si promovemos y defendemos ideas de separación, eso mismo es lo que se producirá entre ellas, el resultado será una falta de conectividad celular. Entonces las células de un órgano no serán solidarias de lo que acontece en las células de otro órgano, lo cual no es una garantía de óptima salud.
Cita: Un faraón (Akenatón) justo creó una escuela de Ciencia Divina y Humana y quiso hacer comprender a los pueblos que el eterno poder no reside en las estatuas o imágenes de los dioses mil, adorados por ellos.
Comentario: Ahora los dioses se llaman teléfono móvil, Tablet, redes sociales y las mil y una facetas del consumismo, pero seguimos exactamente en lo mismo, en la era de la idolatría.
Cita: Moisés, siguiendo los pasos de Akenatón (antecesor del Cristo) deseaba promover la unidad divina y acabar con todas las idolatrías que han multiplicado los dioses, como arena tiene el desierto.
Comentario: El gran reto de nuestra actual civilización sigue siendo el mismo: acabar con esos diosecillos de pacotilla, con todas esas cosas exteriores que veneramos y adoramos creyendo que nos van a aportar la felicidad.
Cita: Se dedujo que aquella tierra hacia la que debía dirigirse el Pueblo Elegido tenía que ser Palestina, atravesada por el Jordán, por eso Moisés orientó hacia allí el Éxodo. El pueblo fiel a Dios (el Pueblo Elegido) recibiría en premio un territorio que Jehová ha endulzado con leche y miel para que tenga todo el sustento necesario. Con el pasar de los años, el pueblo israelita tomó como suyo el nombre de “Pueblo Elegido”.
Comentario: Cabe reflexionar sobre lo que parece haber sido en un principio una simple metáfora, pero que fue interpretado en un sentido literal. Desde una visión simbólica, se puede interpretar que la divinidad, el Yo Superior, el Padre, reserva a las tendencias que representan el Pueblo Elegido, a las tendencias que le son fieles, un espacio paradisíaco, abundante. Podría tratarse de una tierra psíquica, no física. Aunque la abundancia por dentro lleva, tarde o temprano, a la abundancia por fuera. Todos sabemos cuáles fueron las consecuencias, para la Palestina, de la interpretación literal de este pasaje.
Cita: El mundo entero era entonces una ciénaga espantosa de miseria y de lodo. El oro y la hartura de todos los más bajos instintos formaban el ideal de las muchedumbres en todas las comarcas de la tierra. El Egipto fundado edades atrás por unos pocos prófugos fugitivos de la invadida y desolada Atlántida, era el oasis en que aún se encontraban aguas claras para beber. La obra de Moisés era urgente para detener la gran oleada de fango que avanzaba desde todas las latitudes.
Comentario: La historia se repite, resulta curioso observar la plena actualidad de estas reflexiones, parece que activar en la psique la tendencia llamada “Moisés” podría ser una posible salida. Esa tendencia que nos lleva a salir de las ciénagas de la esclavitud (al mundo de la Matrix) y a dirigirnos hacia las tierras de la leche y la miel en las que podemos entrar en contacto con el Yo divino.
Cita: Ramsés II acabó aceptando la salida del pueblo hebreo, dicen que unas 600.000 personas, de Egipto.
Comentario: De la lectura de este libro se deduce que los hebreos no escapaban únicamente del Faraón, sino de Egipto, la antigua tierra que veneraba a múltiples dioses. Como en muchos otros casos, la historia ha llegado a nosotros deformada. Este desafío, como hemos visto, sigue siendo de plena actualidad.
Cita: El pueblo estaba acostumbrado a ofrecer sacrificios de animales para contentar a los dioses, y eso era contrario a los ideales de Moisés (y de Jesús). No resulta fácil cambiar la satisfacción que produce al Yo humano el presentar ofrenda material y cruenta, por el íntimo sentir del espíritu evolucionado al rendir un homenaje puramente espiritual. Tal como una sentida plegaria, un himno cantado con el alma a la par que con los labios, una ofrenda floral presentada con amor y devoción. O agradecimiento por lo que nos ofrece el universo, o reconocimiento de las propias deficiencias y nobles propósitos de dominar al Yo más terrenal.
Comentario: Ahí tenemos un importante concepto: la diferencia entre sacrificio y “sacro facere”, que significa hacer lo sagrado. En la medida en que se potencia el “sacro facere”, uno se aleja del sacrificio. Es decir, en la medida en que ofrecemos al espíritu cosas sagradas, nos alejamos de los sacrificios materiales de órganos o de la renuncias a consumir cosas que nos apetecen.
La Alquimia Genética ha sido pensada precisamente para esto, para ofrecer al alma manjares con los que tenerla contenta. El incienso, los cantos, las danzas etc.. están muy bien pero de alguna manera siguen siendo manifestaciones exteriores. En cambio, la meditación profunda y la conexión con el mundo celular alimentan de verdad al espíritu y le permiten expandirse y ampliar sus dominios.
Cita: En los archivos de la luz, no hacen mención del Maná, que puede ser una alusión alegórica al hecho de que Moisés pudiera alimentar al Pueblo elegido.
Comentario: Si los archivos de la luz no recogen este episodio del Maná, es porque es una metáfora, no una realidad. Pero una realidad que no podía ser comprendida por el gran público, por ello cuando los grandes instructores quieren transmitir una verdad que saben que no va a ser entendida por todos, utilizan el lenguaje metafórico, los símbolos, las alegorías.
Kabaleb cuenta en sus libros que ese Maná que cayó en el desierto era, efectivamente, un símbolo, representaba el cuerpo mental de la humanidad. Cuando uno se libera de la esclavitud que supone estar atado a las normas y exigencias de la Matrix, del mundo de la programación (simbolizado por el antiguo Egipto, por la mentalidad adoradora de objetos exteriores), puede empezar a pensar por sí mismo, puede empezar a conceptualizar, a razonar. Deja de necesitar a alguien exterior que le imponga lo que tiene que hacer o pensar.
La era Covid ha sido, en este sentido, una repetición de la jugada: se ha invitado a la humanidad a salir del mundo de las ideas prefabricadas, de los conceptos precocinados, para empezar a pensar por sí misma. Y se hizo mediante una absoluta y total confusión, digna de la Torre de Babel, en la que fluían, a través de todos los medios de comunicación, toda clase de informaciones contradictorias, muchas de ellas completamente absurdas. Un plan muy sabio si lo observamos desde la sala de mandos del Show de Truman.
Cita: ¡Moisés! –le dijo una voz interior- ¿Sabes acaso si el Eterno Uno Invisible se contentará de estar a solas contigo o te pedirá millares de almas que quieran como tú estar a solas con Él? La soledad con Dios es un descanso para el alma, pero quien viene a esta Tierra no es para descanso permanente y absoluto, sino a momentos, como el viajero cansado busca el agua de la fuente en el oasis del desierto elegido para su camino.
Comentario: Esa voz interior le dice a Moisés que a veces es necesario cierto aislamiento pero el objetivo ha de ser siempre iluminar a otros, no encerrarse en la contemplación. Esa es una importante clave: a quienes alcanzan cierta altura al escalar su propia montaña, les toca lanzar una cuerda a los que están más abajo para ayudarles en la subida. Crecer en solitario no suma puntos de cara a la propia evolución.
En resumen, se trata de un libro de extraordinaria profundidad que invita a grandes reflexiones y que, a pesar de relatar hechos ocurridos hace 3,500 años, es de plena actualidad. Esto nos permite comprobar que pasado, presente y futuro son distintos ingredientes de una misma salsa.
